domingo, 21 de junio de 2009

AMORES (DES)ENCONTRADOS




Me pasó cierta vez con cierta chica.
Fue hace varios años.

Con mis amigos (es un formalismo, fuimos Dany, Pablo, Guillermo y yo) nos dirigimos a Bahiano a bailar cierto sábado de Marzo de 2000. Desde que hacía terapia empecé a animarme a sacar a bailar a las mujeres con convicción; parece que al cambiar el tono de la propuesta hallaba eco.
Comprensión 1: las mujeres detestan los hombres inseguros.
Bueno, serían ya las 4 de la mañana y ví una muy hermosa rubiecita parada cerca del DJ. Mis amigos andaban manoteando algo por ahí y quedé solito en la pista. Como noté que estaba sola me acerqué y (aún hoy me pregunto por qué) naturalmente como si fuera mi amiga, le dije hola muy campante.
-¡Hola!- me contestó.
-¿Bailamos, te parece?-
-Uh, bueno, dale, vamos-
Le di la mano y la aceptó (hasta acá parece la letra de La vi parada ahí) por lo que nos encaminamos a la pista. Comenzamos a movernos como dos cachos de algarrobo y los que estaban al lado se cagaban de la risa de lo troncos de esta pareja de baile. Como varios se reían de nuestra escasa habilidad danzante, nos reímos de los demás y empezó la charla.
-Yo no vengo a bailar, caí de casualidad porque la acompañé a mi hermana, anda por ahí-
-¿Ah, sí?. Mirá vos-
-Vos estás más canchero que yo, por acá andás más seguido parece-
-Vengo casi todos los sábados, ando con mis amigos. Están ocupados por ahí-
-¿Ocupados? jajaja, muy ocurrente-
-Bueno flaca ¿cómo te llamás?-
¿Yo? Julieta. ¡Y no me vengas con el chiste pelotudo del Romeo, por favor!-
-Bueno, Romeo no, pero cómo anda William...- lo cazó al vuelo. ¡Cómo se reía!-
Así estuvimos rato largo; mientras, mis amigos advirtieron de mi "conquista" y se arrimaron a molestar. Querían poner a prueba mi caracter "nuevo".

Prueba superada.

Para mi sorpresa, al rato cayó una morocha de piel bien blanca y ojazos azules, flaca como ella y parecida de cara... encima viene ¡y me saluda!.
-Ah, ella es Andrea, mi hermana. Andrea, te presento a Chris-
-Están entretenidos, les dejo tranquilos- amagó irse pero se quedó al lado. En eso Pablo que también estaba parado y me hacía gesto de "apurala que está regalada", no salía de su asombro. Me hacía el gestito de "esa minita está re buena, mirá lo que enganchaste Don Niembroooo". Me acordé de la hermana.
-Che Julieta, llamalo a mi amigo que baile con tu hermana-
-Dale!- Julieta le hizo el gesto de "acá está mi hermana, apurate". Me arrimé a Andrea y le dije.
-Mi amigo quiere bailar con vos- Esta chica lo llamó con las manos. ¡¡Pablo vino como poseído!!. Ahora los 4 seguiimos bailando un rato.
-¿Querés tomar algo Chris? tengo sed- fuimos a la barra y nos pagamos una jarrita de cerveza a medias. Ahí ya tranquilos charlamos rato larguísimo. Resulta que era de Haedo, tenía un año menos que yo (24, yo tenía 25) y le gustaba más ir a recitales que el bailongo. Nos gustaba la misma música (pensaba que era la única loca que escuchaba The Hollies!!!, aparte de Beatles y etcéteras) y se interesó por mis aptitudes musicales. Hasta le recité una de mis canciones de memoria.
-Che, boludo, armate una banda, con letras así te vas a llenar de guita-
Al rato cayó la hermana pero por poco. Tomó un trago y se fue con Pablo por ahí.

Así llegamos al cierre de la joda. 6 de la mañana.
-Mirá, paro siempre en la estación en el andén bajito, si me ves del tren bajate y vení a hablarme- en esa época el celular no era cosa común y el mail menos. Facebook era un rejunte de palabras anglosajón. 
Ah, este pelotudo ni le robó un beso, hablamos tanto y con tantas ganas que los chicos después me cagaron a pedos por no llevarla al telo que estaba al lado o al menos sacarle un pico o un número para ubicarla...
Simplemente las dos hermanas me saludaron, Julieta volvió a decirme.
-Sos re copado Chris, el boliche no es lo nuestro, no vengas más a bailar, una chica para vos no existe en estos lugares. Andá a recitales. Y no te olvides, estoy en la estación de Haedo...-
-Bueno July... chau-

Qué se yo, a los pocos días mis amigos me felicitaron por el progreso.
-No es tan dificil, boludo. Es acercarse y tirarse a la pileta. ¿Por qué no le diste un beso? ¡¡¿No te diste cuenta de lo buena que estaba esa minita?!! ¡¡Por Dios, me da calce una así y le echo 5 fierrazos sin sacarla!!!- me decía Dany
-Sí que me dí cuenta, nunca vi un culo tan redondito como ese. Encima flaca y alta como yo, como me gustan-
-¿Y?-
-no me animé a besarla.....-

Nunca fui a la estación de Haedo a buscarla. Nunca la vi del tren cuando volvía del trabajo. Es más, viajé algunos domingos a la tarde a ver si la cruzaba y nada. Así que desistí. Pero lo que son las cosas. Cierta vez, volvía de trabajar como todos los días, algunos meses después de esa noche. Paró el tren en Haedo y entre los que bajaban del vagón...
¡BAJÓ JULIETA!.
Cuando la reconocí el tren ya arrancaba rumbo a Morón. Se dio vuelta y miró a la ventana donde estaba sentado. Se quedó parada en el andén. Pensé en bajar en Morón y volver por si intuyó que haría eso.
Comprensión 2: no hay manera de forzar el destino, si nos desencontramos por algo fue.

Miren lo  que me hizo disparar el chiste de Liniers!!!. Recordar a esta Julieta.

Ahora esta pregunta quedó flotando en el éter:
¿Dónde estás ahora que el viento borró tus manos?

Y nunca más volví a verla.Adiós Julieta.

Chris




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