domingo, 7 de junio de 2009

SITUACIÓN PECULIAR

La de ayer sí que fue una tarde extraña. 
Como ya se habrán enterado, festejamos el cumpleaños de los 2 geminianos. Iván (26 de Mayo) y Julieta (5 de Junio). Estuvimos desde la mañana a las corridas (bueh, desde el viernes a la noche que me puse manos a la obra y preparé la torta de cumpleaños de mi hija: Torta de pomelo rellena con crema, dulce de leche, chocolate amargo troceado y cubierta con glassé de pomelo rosado... les juro que el glassé quedó rosita posta; al ponerlo sobre el bizcochuelo perdió el color. Es lo de menos, la torta quedó espectacular, los famélicos pedían más porciones) con el tema de ordenar la casa, limpiar, bañarnos todos, preparar las cosas. Llegó el momento de recibir a los invitados, vinieron algo tarde pero cayeron todos juntos (otra que el Come together de Los Beatles) y se armó la joda. Hasta mi cuñada (con quien sigo distanciado) mandó a mis sobrinos. ¡Descontrol tantos chicos en casa, y mis hijos chochos con los primos!. 
En otro posteo habrán leido que Vero estaba invitada a la fiesta. Después de lo del martes ni idea qué podía pasar; como el hijo de ella está "enamorado" de July , no iba a faltar. La cuestión pasa por cómo reaccionaría Naty al verla...
Tocan el timbre y sale Natalia a atender.
-Chris, ahí llegó Verónica- Nunca la llama a secas así, siempre es Vero. Eso me sonó mal...
Entró con su hijo y su madre, saludó a todos, me saludó algo fría esta vez (es de abrazarme, pero dadas las cosas fue más de protocolo el saludo) y se acomodó. Vino a la fiesta otra amiga que bloggea a la par de nosotros (no voy a decir quién es, quedará en la incógnita) y al verla enseguida se dio cuenta que era la chica de mis posteos. La vio, me miró y puso cara de:
-Sos un hijo de puta, cómo te atrevés a traerla al cumple de tu hija, sos un zarpado-
No pasó nada raro. Hablamos como si nada hubiera ocurrido, Naty y Vero se hablaron pero no mencionaron nada de lo del martes; pensaba que tal vez Naty aprovechaba la primera y le daba un palazo. 
No pasó nada. Lo único, que Naty no tenía muchas ganas de sacarse una foto con Vero. 
El tema es que fue una situación peculiar. Ocurre que Gianfranco (el hijo de Verónica) sueña noche y día con Julieta. ¡6 años casi y "enamorado" de mi pequeña reina, no dejó que ningún chico se le acerque, en serio!. Así que vino con su mamá al cumple. Fue algo incómodo que se hayan juntado Verónica y Natalia, Natalia y Verónica. Un grotesco del cine italiano. 
La verdad es que a veces me las busco yo solito.

Chris

1 comentario:

Marflo dijo...

Muy bueno todo Chris, y a lo mejor las caras te las imaginaste :-)
Dice tu amiga la que blogea con uds que la pasò muy bien! Saludos a Naty y los babys!

MINUTO A MINUTO!

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